Tras siete meses de paréntesis de la presencialidad por el empeoramiento de la situación sanitaria por la pandemia, el Club de Encuentro inició nuevamente las conferencias con el formato habitual, y en ocasión acogió la ponencia del reconocido jurista Antonio Garrigues Walker, bajo el título: “El papel de la sociedad civil en estos momentos”.
La presidenta, Amparo Matíes, dio la bienvenida de nuevo a los socios y socias presentes en el primer encuentro presencial de 2021 y aprovechó para lamentar la pérdida del ex presidente, José Luis Boronat, fallecido el pasado mes de marzo. Tras estas sentidas palabras, la presidenta presentó la proyección del primer panel de expertos de socios y socias elaborado en la primera parte de la pandemia con las reflexiones de 36 socios y socias en torno a qué puede hacer la sociedad civil para la recuperación y mejora de la sociedad tras la pandemia. Al mismo tiempo, avanzó que ya está en marcha la producción del segundo de los paneles.
Tras esta introducción, tomó la palabra el presentador del ponente, Ubaldo Nieto, notario y socio del Club, que calificó a Garrigues como “un activista de la sociedad civil, se anticipa a los problemas y los analiza. Como buen liberal y humanista es partidario de una sociedad civil fuerte”.
El presidente de la Fundación Garrigues, Antonio Garrigues, inició su intervención apuntando los factores básicos que se asocian a una sociedad civil sana, como son “La calidad democrática, la calidad económica y la cultura”. Esta última la destacó especialmente, ya que “una sociedad culta, es potente, y en España se le da un valor relativamente pequeño, como separado de los demás. La cultura es absolutamente todo. La idea de tener un pueblo culto debería ser el primer movimiento de la sociedad civil. Reclamar la cultura.”
Por otra parte, el Sr. Garrigues quiso remarcar la idea de lo “global”, que él considera como básica, “Estamos en un mundo global y limitar nuestra capacidad de pensamiento a nuestro país, territorio o ciudad, es un profundo error. Hay que sentirse bien con lo suyo, pero es inevitable saber lo que está pasando en otros países, continentes.”
Pero para que una sociedad civil sea fuerte y consciente debe darle importancia a los valores éticos y morales, eso es para el jurista, una de las responsabilidades de la sociedad civil, porque según afirmaba, “cuando uno hace lo que tiene que hacer, se siente bien y cuando no lo hace, no se siente bien. El comportamiento ético clasifica a una sociedad y en España a los valores éticas, no se le da la importancia que tiene. He publicado un libre reclamando a no ser engañado. Habrá que encontrar una solución jurídica para que cuando uno engaña, tiene unas consecuencias.”
Al hilo de esta cuestión, Garrigues valoró positivamente la faceta filantrópica de la sociedad americana, y, sobre todo, la educación de ayudar a los demás que reciben. Desde muy pequeños se les inculca la convivencia en red y en la colaboración con las causas más necesitadas de su entorno.
Un tema que despertó bastante interés, y que fue fruto de varias consultas en el turno de preguntas, fue el tema de China “porque está alcanzando un nivel de desarrollo económico tan importante, al mismo tiempo que limita las libertades políticas y fuera de sus fronteras se plantea el debate de la restricción de la libertad política en pro de la economía. Lo que hay que valorar de China es que es un país muy inteligente y se está desarrollando tecnológicamente muy bien y eso preocupa a EE.UU.”
La primera ponencia de 2021 mantuvo las estrictas medidas de seguridad y el acceso se mantuvo restringido a las personas socias. No obstante, el aforo casi se completó con alrededor de 60 asistentes, entre ellos, representantes de las autoridades como la presidenta del Consell Jurídic Consultiu, Margarita Soler, el senador por Valencia del Grupo Popular, Fernando de Rosa, la concejala de Acción Cultural del Ayuntamiento de València, Maite Ibáñez y la concejala portavoz adjunta del Grupo Popular en el Ayuntamiento de València, Mª José Ferrer Sansegundo, así como diferentes representantes de la sociedad civil valenciana.